¿Se os han olvidado un montón de castañas en la despensa y se han quedado secas? Pues hala, a hacer sopa.
Eso es lo que me ha pasado a mí, y buscando recetas llegué a esta crema de castañas y setas publicada hace pocos días en El Comidista. Los ingredientes son bastante similares, las proporciones y la preparación algo distintas porque las castañas que yo tenía estaba secas, casi pilongas, y tenía además un montón de setas de pie violeta que nos ha traído el padre de M.A. y las usé en vez de los boletus secos. Vamos, que es otra receta, pero se parece y está muy rica.
Para 2-3 raciones he utilizado:
-1 cuenco de castañas secas o pilongas, o algo más si son frescas.
-1 puerro
-1 puñado generoso de setas (las mías llenaban un plato grande)
-1 patata
-aceite, sal, pimienta
-agua o caldo (yo usé el de cocer las castañas)
-1 taza de leche evaporada, o nata, o leche a secas
Si se utilizan las castañas secas hay que ponerlas en remojo el día anterior; las mías estaban enteras, así que les quité la cáscara exterior y lo que pude de la piel y las puse en agua. La piel se irá desprendiendo, y la que les quede pegada o entre los pliegues se puede sacar al día siguiente con ayuda de un palillo de madera. Una vez remojadas y peladas se ponen a cocer: yo las hice en la olla exprés y estuvieron cerca de 15 minutos (podrían haber sido incluso menos, algunas ya habían empezado a partirse). Se reservan las castañas y el caldo de cocerlas.
En una olla se rehoga el puerro picado; cuando está tierno se añaden las setas limpias y troceadas, y se rehogan también unos minutos. Se añade la patata en trozos y se remoja todo con el caldo de cocer las castañas -pasado por un colador, por si hubieran quedado pieles o trocitos- lo justo para cubrir, o algo más si lo vamos a cocer en olla abierta. Se deja 3-4 minutos si es olla exprés o 25-30 minutos si es en olla abierta. Se agregan entonces las castañas ya cocidas, la leche evaporada, un poco de pimienta y se bate todo. Si la queremos más fina se pasa por un chino o un colador.
Se puede servir con pan frito, con unas setas salteadas... yo sólo puse unos trocitos de castaña y más pimienta.
Y eso es todo; si se hace con castañas pilongas se ahorra una la tarea de pelarlas, y si se hace con castañas frescas se pueden asar en vez de cocerlas. Yo decidí hacerlas cocidas y por separado porque hice una buena cantidad, de las que usé sólo una parte para la sopa. Las otras están reservadas para alguna receta dulce, que publicaré pronto si sale bien. (Cruzo los dedos, que con la paliza que me ha dado pelarlas...)